Etapas del desarrollo psíquico desde una perspectiva de la Psicología Profunda

MARÍA PATRICIA QUIJANO R.

María Patricia Quijano Restrepo es psicóloga, egresada de la Universidad de San Buenaventura y actualmente trabaja como terapeuta en clínica particular. Es Miembro Fundador de ADEPAC y Coordinadora de la asociación en la ciudad de Medellín. El presente artículo fue publicado por la Universidad de Antioquia como documento de apoyo para los cursos de Psicología Evolutiva y el Juego de la Caja de Arena. Facultad de Psicología Universidad de Antioquia, 2003.

El texto que ha continuación se presenta, ha sido extractado casi exclusivamente del libro Sandplay Studies (1), sobre la técnica de la caja de arena (todo aquello encerrado entre comillas), con excepción de las notas de pie de página y algunos comentarios propios.

Charles T. Stewart, uno de los autores que contribuyen al libro Sandplay Studies, plantea, a partir de su propia experiencia, la necesidad de desarrollar una teoría que comprenda el desarrollo evolutivo como parte fundamental del estudio del juego de arena. Es así como propone revisar fundamentalmente, entre otras teorías del desarrollo, la teoría planteada por el psicólogo analítico, y discípulo de Carl Gustav Jung, Erich Neumann, inclinándose a considerar a esta como la teoría más integral del desarrollo.

“A través de la perspectiva de Neumann, como psicólogo cultural y desde la psicología profunda, se puede vislumbrar la posibilidad de reconstruir la filogénesis de la conciencia del ego, usando la fenomenología del mito, tal como procede a demostrar en Los orígenes y la historia de la conciencia (1962). Luego, en su obra El niño (1973), Neumann presenta el paralelo ontológico con este desarrollo filogenético”.

Para comenzar es preciso, entonces, retomar el concepto de la evolución creativa planteado por Neumann, el cual constituye un factor determinante en su obra y el que define así:

La evolución de la conciencia, como una forma creativa de la evolución es un logro particular del hombre de Occidente. La evolución creativa de la conciencia del ego significa que, a través de un proceso continuo de miles de años, el sistema de la conciencia ha absorbido más y más contenidos inconscientes, extendiendo así sus fronteras progresivamente. Sin embargo, desde la antigüedad hasta nuestros días, podemos ver como un nuevo patrón diferencial de cultura continuamente suplanta el canon previo; Occidente, con todo, ha tenido éxito en adquirir una continuidad histórica y cultural en la cual cada canon gradualmente es integrado. La estructura de la conciencia moderna descansa sobre esta integración y, en cada período del desarrollo del ego, tiene que absorber porciones esenciales del pasado cultural transmitido a través del canon de valores que encarnan su propia cultura y sistema de educación (2).

Ahora bien, Neumann señala como en este recorrido por la historia colectiva humana así como por la historia personal, nos encontramos con elementos en común que nos conducen a explorar el territorio psíquico en el cual ha tenido lugar el desarrollo de la conciencia.

En el curso de su desarrollo ontogenético, la conciencia del ego individual tiene que pasar por las mismas etapas arquetípicas que determinaron la evolución de la conciencia en la vida humana. El individuo ha de seguir en su propia vida el camino que la humanidad ha recorrido antes que él, dejando huellas de su viaje en la secuencia arquetípica de las imágenes mitológicas (3).

Encontraremos expuestos, más adelante, algunos lineamientos básicos de las fases de desarrollo propuestas por este autor, siendo fundamental observar en ellas que el ego, inicialmente como germen gravitando en lo inconsciente, paulatinamente va emergiendo hasta hacerse visible en el mundo psíquico. Tal como plantea Neumann:

La historia del surgimiento de la conciencia se da mediante un desarrollo en fases, en el transcurso del cual el yo va dejando de estar contenido en lo inconsciente, en la situación urobórica originaria, hasta llegar a establecerse, al final del proceso, como un sistema psíquico separado y enfrentado al inconsciente, como un sistema consciente que constituye el centro de la conciencia moderna. En este desarrollo, que conduce hacia una liberación respecto de la preponderancia del inconsciente, en tanto que se encuentra en oposición a esta emancipación del yo, es femenina, como se comprueba en la mitología y la simbólica del inconsciente colectivo. La fase en la que el yo-conciencia todavía mantiene una relación infantil con lo inconsciente, siendo todavía relativamente dependiente, se presenta en el mito mediante el arquetipo de la gran madre (4).

Las siguientes son las etapas del desarrollo consideradas desde el modelo explicativo que refleja la organización de los mundos, en la técnica del juego de arena que propone Charles T. Stewart y, particularmente, desde esta perspectiva de la psicología profunda.

INFANCIA I: NACIMIENTO A 7-10 MESES
INFANCIA II (INF II): 7-10 A 12-24 MESES
JUEGOS DE APARICIÓN Y DESAPARICIÓN

“FASE DEL DESARROLLO: Cuando volvemos la vista para examinar la teoría de Neumann, en este nivel, encontramos que la correlación de las etapas del desarrollo del ego y la edad cronológica es más precisa en la infancia. Repetidamente el autor (Neumann, 1973) refiere a la infancia la etapa del desarrollo del ego llamada Fálico- Ctónica, comprendida en dos subfases: (1) La relación primaria (infancia I, del nacimiento a los 7-10 meses), un período de identidad inconsciente en el cual la unidad del infante radica en el cuerpo-self y donde la madre es el self-auxiliar; y (2) “el verdadero”nacimiento del infante humano (infancia II, 7-10 a 12-24 meses), período durante el cual el self- auxiliar se “desplaza”de la madre al niño, uniéndose al cuerpo-self hasta formar el self unificado. Esta segunda fase de la infancia está ubicada cronológicamente al final del primer año postnatal (11-13 meses). A pesar de que todo el período de la infancia es matriarcal, las subfases están diferenciadas arquetípicamente en uroboros y la gran madre. Finalmente, la culminación de esta etapa del desarrollo es la primera configuración del ego integrado y la polarización del mundo en opuestos. Podríamos especular que las experiencias infantiles de “desplazamiento” pueden ser una fluctuación ordenada dentro del marco del paradigma de aparición-desaparición”.

INFANCIA TEMPRANA I (EC I): 1-2 A 3-4 AÑOS
JUEGOS DE ORDEN Y DESORDEN

“FASE DEL DESARROLLO: Ahora podemos observar la segunda etapa de desarrollo del ego, de Neumann, la etapa Fálico-Mágica, la cual se puede correlacionar con la EC I, en el contexto de juegos de orden y desorden. El período comienza con la constelación arquetípica de lo que Neumann define como la separación del mundo de los padres, y se completa en la primera fase del ciclo del héroe, el nacimiento del héroe. Los niveles correspondientes a la conciencia del ego, son la polarización del mundo en los opuestos y la primera configuración del ego independiente y antropomórfico. Durante este período el ego mágico- fálico es un ego fragmentado (i.e., intermitente y aún no-continuo), su período de constelación depende de la concentración ritual de energía psíquica, el último casi siempre ocurre en el círculo mágico de simulación. En los intervalos entre estas estructuraciones episódicas el ego, retorna al mundo unitario de la participación mística y de la primera interrelación. Es así como la etapa normal del ego durante EC I es de conciencia fluctuante, de orden y desorden. En esta nueva etapa del desarrollo, todavía es difícilmente estable el universo bipolar, podemos notar de nuevo el potencial de fluctuación entre el equilibrio y el caos. Una lista parcial de los opuestos identificados durante este período, nos da alguna idea de esta fluctuación: ego y no-ego, conciencia e inconsciencia (primeros reportes de sueños); el yo y el mundo, amistoso y no amistoso, bueno y malo, sí y no, real y aparente, presente y pasado ( aparece la memoria); aceptación y rechazo, apertura y obstaculización”.

INFANCIA TEMPRANA II (ECII): 3-4 A 6-7 AÑOS
JUEGOS CENTRADOS EN LA PERSONA

“FASE DEL DESARROLLO: La tercera etapa del desarrollo del ego que plantea Neumann, Mágica-Guerrera, marca la transición del matriarcado al patriarcado. Neumann indica, sin embargo, que el desarrollo puede todavía describirse como una totalidad porque el paso del matriarcado al patriarcado aplica tanto a niños como a niñas. En el ciclo del Héroe de la fase Mágico-Guerrera, está incluido el Asesinato de la Madre y del Padre, los cuales ahora están acentuados negativamente como la Madre Terrible y el Padre Terrible. Neumann (1973), al respecto, comenta lo siguiente:

Esta acentuación de lo bélico en lo masculino es necesario tanto filogenéticamente como ontogenéticamente para la liberación de la conciencia y del ego de la preponderancia del matriarcado. Sólo el ego que pelea heroicamente es capaz de sobrepasar lo femenino-maternal, lo cual, cuando impide en su desarrollo al ego y al principio masculino de conciencia hacia la independencia, se convierte en la madre terrible, el dragón y la bruja, como fuentes de ansiedad (p. 168)”

MEDIANA INFANCIA (MC): 6-7 A 11-12 AÑOS
JUEGOS DE DIFERENCIACIÓN SEXUAL DE PARES.

“FASE DEL DESARROLLO: Nos ha sido negada la visión completa de esta fase del desarrollo del ego de Neumann, la fase denominada Solar-Guerrera, como lo explica el siguiente párrafo de su editor (Neumann, 1973): “El autor no vivió para completar el presente trabajo. Este termina en la mitad de la sección concerniente a la relación entre el Self, el arquetipo del padre y el super-ego, además no alcanza la fase del desarrollo en la cual la niña requiere un tratamiento por separado” (pp. 202-03). Sabemos, sin embargo, que Neumann designó la fase Solar-Guerrera como el período durante el cual el ego-héroe que emerge se identifica a sí mismo con el arquetipo del padre. También indica que es en este punto en donde los sexos empiezan a divergir en su desarrollo y que una niña empieza a diferir del niño en su psicología”.

FASES DEL DESARROLLO EN LOS MUNDOS DE ARENA DE LOS NIÑOS

Dentro de las consideraciones que los autores del libro ya mencionado, Sandplay Studies, hacen sobre las etapas evolutivas del desarrollo, cabe mencionar la contribución de Katherine Bradway, la cual incluye la propuesta de Neumann, pero también la visión de Dora Kalff, una de las pioneras en el trabajo de la técnica del juego de arena. A continuación, la autora ya mencionada, describe el aporte que uno y otra realizan:

“En la observación realizada a los mundos de arena de los niños, he encontrado útil relacionarlos con las cinco etapas del desarrollo del ego propuestas por Erich Neumann (1973) y con las tres etapas planteadas por Dora Kalff (1971). Neumann caracteriza a la primera fase como “Fálica-Ctónica”, cuyas formas animales y vegetales son pasivas; “pues aún no se ha liberado a sí mismo de la dominancia del poder matriarcal de la naturaleza y el inconsciente” (p. 139). Neumann habla de las dos etapas siguientes como “Mágica-Fálica” y “Mágica-Guerrera”, las cuales se diferencian de la primera etapa por la actividad del ego”. Neumann continúa diciendo:

“Es el ego Mágico-Guerrero que primero supera su independencia del matriarcado, tanto así que efectúa la transición al patriarcado con el consecuente “ego solar” que le está relacionado. En la fase solar-guerrera, el ego se identifica a sí mismo con el arquetipo del padre y es seguido por la fase Solar-Racional del ego patriarcal adulto, cuya independencia culmina con la libertad relativa de la voluntad… (p. 139)”

La experiencia de Kalff coincidió con la teoría de Neumann y le permitió proponer tres fases del desarrollo del ego: La fase animal-vegetativa, la fase guerrera y la fase de adaptación al colectivo (p. 24)”.

ANEXO

FASES DEL DESARROLLO PSÍQUICO DEL SER HUMANO
(SÍNTESIS PROPUESTA POR CHARLES T. STEWART PARA LOS ESTUDIOS DEL JUEGO DE ARENA) (5)

CuadroMPQ

NOTAS DE PIE DE PAGINA

(1) K. Bradway y otros, Sandplay studies, San Francisco, C.G. Jung Institute, 1981, p.47,57, 61,70,85,93. Traducción libre por Maria Patricia Quijano Restrepo.

(2) E.Neumann, The origins and history of consciousness, New York, Bollingen, 1995, p.xviii. Traducción libre por Maria Patricia Quijano Restrepo.
(3) Ibid

(4) E. Neumann, citado por Marta Cecilia Vélez en: M.C., Vélez, Los hijos de la gran diosa, Medellín, Universidad de Antioquia, 1999, p. 212.
(5) K. Bradway y otros, Sandplay studies, San Francisco, C.G. Jung Institute, 1981, p.50. Traducción libre por Maria Patricia Quijano Restrepo.

BIBLIOGRAFIA

Bradway, K. y otros, Sandplay studies, San Francisco, C.G. Jung Institute, 1981.

Neumann, E.,The origins and history of consciousness, New York, Bollingen, 1995, p.xviii.

Vélez, M.C., Los hijos de la gran diosa, Medellín, Universidad de Antioquia, 1999.

Esta entrada ha sido publicada en Publicaciones/Ponencias y etiquetada como , , , , . Guarda el enlace permanente.